TARTA DE PERAS Y PASAS

Este año no he visto la nieve en el lugar donde vivo, aunque sí la vi por desgracia  hace dos sábados a las dos de la mañana en gran parte de la carretera que me lleva a casa después de trabajar. Pero lo que sí se nota aquí es el aire que viene tan frío, lo que nos recuerda que no tan lejos hay lugares nevados.

Este frío me invita sobre todo a hornear algo dulce, sentarme en el sofá con una mantita y un trozo del dulce recién hecho y horneado. Y es que me encantan este tipo de tartas aromáticas comérmelas tibias. Esta vez he elegido pera, aunque podéis poner manzana, deliciosa igualmente.

Y a ese día de sofá, manta y dulce, un buen libro es lo mejor para pasar la tarde. Hoy os traigo el último que me he leído: El ser con traje de padre de Alfonso Quiles Salvador. Tal vez, todavía no sepáis quién es, pero tiempo al tiempo. Yo si lo conozco y sé quién es, pues es mi primo. Recién, una editorial, después  de llamar a muchas puertas, ha conseguido que su sueño se viera hecho realidad al publicar su libro.

En él podréis encontrar una pluma joven (de hecho, lo escribió hace algunos años cuando él era muy jovencito), donde podréis encontrar temas de la más candente actualidad, como es la violencia de género,  los abusos sexuales, la homosexualidad.....todo ello con tintes autobiográficos y visto desde los ojos de un niño. Desde la primera hoja el libro te engancha y quieres saber cómo termina esa terrible realidad por desgracia tan actual. Os invito a todos a conocer su primer libro que podéis encontrar en Amazon a un buen precio.
Mi primo también está muy concienciado con el Acoso Escolar, que por desgracia sufrió en sus propias carnes. Acaba de abrir una página en Facebook donde ayuda a otras personas. Si os interesa el tema o conocéis a alguien que lo necesite, no tenéis nada más que compartir la página o darle al me gusta para recibir las actualizaciones.

INGREDIENTES: 6 personas  DIFICULTAD: Fácil  PREPARACIÓN. 30 min  REPOSO: 1 hora  COCCIÓN: 45 min

Para la masa: (o dos láminas de masa quebrada congelada)

-275 gr de harina

-una pizca de sal

-125 gr de azúcar

-125 gr de mantequilla

-1 huevo

-1 yema

-1 cucharadita de extracto de vainilla

-1 cucharada de agua

Para el relleno:

-4 cucharadas de mermelada de albaricoque

-50 gr de galletas

-800 gr ó 1 kg de peras

-1 cucharadita de canela molida

-75 gr de pasas

-25 gr de azúcar moreno

-harina, mantequilla y azúcar glas

1. Primero prepararemos la masa: Tamizar en un bol amplio la harina y la sal.

2. Hacer un hueco en el centro e incorporar el azúcar, la mantequilla cortada en trocitos, el huevo, la yema, la esencia de vainilla y una cucharada de agua. Amasar con las manos. Si la masa está muy seca, añadir otra cucharada de agua y seguir amasando. Si por el contrario, la masa se pega en exceso a las manos, añadir un poquito más de harina.

3. Formar una bola y envolver en papel film trasparente. Dejar en la nevera 1 hora aprox.

4. Engrasar con mantequilla un molde rectangular, tanto por la base como por las paredes. Espolvorear con harina y retirar el exceso.

A continuación, espolvorear una superficie de trabajo con harina. Sacar la masa del frigorífico y estirar la masa con ayuda de un rodillo. Forrar el molde con la masa e ir recortando el exceso de masa de los bordes.

5. Precalentar el horno a 200º C. Extender las cuatro cucharadas de mermelada de albaricoque en el fondo de la masa.

6. Desmigar las galletas y espolvorear encima de la mermelada.

7. Cortar las peras por la mitad y cortar las mitades en rodajas finas.

8. Disponer las rodajas de pera por la tarta.

9. Espolvorear con canela, esparcir las pasas y el azúcar moreno.

10. Con la masa sobrante hacer un cordón e ir poniendo trocitos de cordón por la tarta en una dirección.

11. Partir más trocitos de cordón y poner encima de los ya existentes pero a la inversa en forma de enrejado. Hornear a 200º C con calor arriba y abajo durante 45 minutos aprox. Si la parte de arriba de la tarta queda dorada muy pronto, tapar con papel de aluminio y seguir la cocción. Dejar entibiar, espolvorear con azúcar glas y servir fría o tibia.