GALLETAS DE MANTEQUILLA CON FORMA DE ROSA

Pasadas las navidades toca depurar un poco el cuerpo, lo sé, pero la receta salada y sanota, me la dejo para la semana que viene, porque también me toca depurar un poco el blog de recetas que tengo desde hace meses y sin publicar.
Estas galletas, las llevo arrastrando durante meses y ya va tocando subirlas a la red. La idea surgió a partir de una imagen que vi en Pinterest.

Me encanta hacer galletas, pero no comerlas, como no sean que lleven chocolate o algo especial. Las que menos me gustan son las de mantequilla, así que a la hora de subirlas, también me vuelvo perezosa. Pero sé que sois mayoría a los que os gusta este tipo de galletas, así que aquí están por fin.
Por cierto, a pesar de que llevan ocho meses en reserva, recuerdo el día que las hice, era sábado por la mañana y fue el día que se casaron Megan Markle y el principe Harry de Inglaterra.

Así que mientras veía la ceremonia en directo y cocinaba, surgió la idea de sacar el té y las tacitas monas, esas que nunca sacas por miedo a que se rompan, la ocasión lo merecía, ja, ja. Ya lo tengo todo preparado, la hora del té ha llegado.

INGREDIENTES: 24 galletas  DIFICULTAD: Fácil  PREPARACIÓN: 40 min  REPOSO: 1 hora   COCCIÓN: 10 min 

-150 gr de azúcar

-175 gr de mantequilla fría sin sal

-350 gr de harina

-1 pizca de sal

-1 huevo

-1 yema de huevo

-2 cucharaditas de extracto de vainilla líquida

1. Poner en un bol amplio el azúcar, la harina y la pizca de sal. Cortar la mantequilla en trocitos y mezclar con las manos, deshaciendo la mantequilla con los dedos hasta conseguir una textura de serrín.

2. Incorporar el extracto de vainilla, el huevo y la yema. Mezclar con las manos hasta conseguir una masa homogénea. 

3. Formar una bola con la masa, envolver en papel film transparente y reservar en la nevera 30 minutos. 

4. Enharinar una superficie de trabajo, extender la mitad de la masa con ayuda de un rodillo, si vemos que la masa se pega al rodillo espolvorear por encima con más harina. Dejar la masa fina y con ayuda de un cortapasta redondo de unos 7 cm de diámetro cortar círculos de masa (procurad que no sean mucho más grandes los círculos). Hacer lo mismo con la otra mitad de la masa (la trabajaremos mejor si no utilizamos toda la masa a la vez). 

5. Para formar las rosas vamos a sobreponer una parte de un círculo encima de una parte de otra, seguiremos con una tercera y con una cuarta como indica en la fotografía. 

6. Doblar el borde del primer círculo y rular hasta el final pero sin apretar, tal y como veis en la fotografía. 

7. Cortar el rulo por la mitad para tener dos mitades de galletas. 

8. Poner con los pétalos hacia arriba y abrir ligeramente, no en exceso para que luego no se abran demasiado al hornear. 

9. Poner las galletas encima de una placa forrada con papel de horno reservar en la nevera entre 30 minutos o 1 hora. Es muy importante que estén bien frías cuando vayamos a hornearlas. 

10. Precalentar el horno a 200º C. 

Hornear las galletas aproximadamente 10 minutos con calor arriba y abajo a 200º C. Los primeros minutos estaremos pendientes del horno y cuando veamos que las galletas se han dorado taparemos con papel de aluminio y bajaremos la temperatura a 180º y dejamos que sigan horneándose. Sacar del horno y dejar enfriar en una rejilla. 

NOTA: es muy importante "quemar" la superficie de las galletas al principio para que las galletas mantengan su forma y no se vayan derritiendo conforme se van horneando. Por ello pondremos una temperatura alta todo el tiempo. Si vuestro horno no coge mucha temperatura y le cuesta hornear, es mejor subir la temperatura aún mayor de los 200º C. 

También es importante no abrir mucho los pétalos, me aguantaron mejor las galletas que le había bajado poco los pétalos. Las galletas del centro de la bandeja, son las que mejor salieron y las de los lados las que más perdieron la forma, aún así, todas tenían forma de rosa. 

Aunque veáis al principio las galletas morenas, recordad que la base de las galletas es más gorda y le costará más cocerse, por eso pondremos el papel de aluminio, para que las galletas no se sigan quemando pero si cociéndose.