Halva de Zanahorias

Última semana de octubre, semana de Halloween o Noche de los difuntos y de Todos los Santos. Esta vez, un poco extraña, sin niños disfrazados llamando a las puertas y cementerios casi vacíos. Todo muy distinto, esperando que el año siguiente, todo sea un poco mejor. 

La receta que os traigo está sacada de una revista bastante antigua, y me sorprendió por su textura y sabor. Aunque veáis que tiene ingredientes comunes y una elaboración más o menos normal, si me pareció distinta en sabor y no sabes muy bien con qué otro postre compararlo. Está hecho con zanahoria, pero bien lo podéis hacer con calabaza, al final de la receta, encontraréis la explicación con la variante con la calabaza. También la podéis veganizar con leche vegetal y con agar-agar en vez de gelatina animal. Una receta interesante. 

Me habéis preguntado varios compañeros blogueros cómo me está yendo laboralmente, pues sabéis que durante la pandemia, me mandaron a un ERTE y con el futuro bastante negro. Ya que habéis sido varios los que me habéis preguntado, os cuento un poco aquí como va el tema. Muchos sabéis que soy profesora de baile, aunque doy varios tipos, me centro especialmente en baile de salón, y eso está prácticamente muerto, por no decir muerto del todo. Ningún centro en el que trabajaba, ha podido soportar dar clases en estas condiciones, no todos son lugares amplios y la mayoría necesita a todos los alumnos para que funcione y no pueden cubrir gastos. Con las clases de baile moderno, más de lo mismo, y la finalidad, es, al fin y al cabo, hacer festivales y actuaciones, que están descartadas totalmente. Sólo una de las escuelas de música me llamó para continuar las clases, que eran los sábados por la noche, los alumnos que tenían pagada la matrícula decidieron que no se les devolviera el dinero y seguir este curso con las clases, pero la localidad tuvo que pasaren octubre de nuevo a fase 2 y ahora están confinados y no he llegado a ir. Ahora, con el toque de queda y que posiblemente no pueda cambiar de comunidad, pues la escuela de música es de Castilla La Mancha, dudo mucho que empiece. 

Pero, como dice el dicho, como Dios aprieta pero no ahoga, en el centro en el que trabajo aquí, al lado de mi casa, en Requena, han continuado con las clases, el centro es grande, y se pueden permitir tener a 10 alumnos por clase, con muchísimas medidas de seguridad y me han ampliado las horas, pues tenía mucha gente ya el año pasado y para no dejar a tanta gente fuera, han dado más horas a los profesores. También me han dado otras clases de gimnasias de todo tipo ya que la profesora que los daba no ha seguido con las clases este curso y ahora las doy yo. Una de idiomas también se fue del centro y también me han dado sus clases a mí. Así que ahora no paro, preparando clases ya que no tengo tanta práctica, e impartiéndolas, pero ahí va, funcionando y esperando que continúe todo así, aunque ya sabéis que está difícil que no haya parones y estemos un tiempo con más restricciones. Por una vez, tengo un horario de persona normal (es como lo siento), no de tarde-noche, trabajando fines de semana, a deshora, no tengo tiempo para nada, eso sí y cocinando la comida para el día siguiente a las 10 de la noche, cansadísima, pero contenta. Gracias por preocuparos, de momento, todo Ok.  

INGREDIENTES: 8 personas  DIFICULTAD: Fácil  PREPARACIÓN: 10 min.  COCCIÓN: 50 min REPOSO: 3 horas

-500 gr de zanahorias

-625 ml de leche

-2 cucharadas de pasas

-200 gr de azúcar

-50 gr de mantequilla

-7 hojas de gelatina neutra

-1 cucharada de coco rallado

-1 cucharada de pistachos pelados

-una pizca de nuez moscada

1. Pela y ralla las zanahorias

2. Pon la zanahoria rallada junto con la leche, lleva a ebullición y deja cocer 10 minutos removiendo de vez en cuando. 

3. Mientras, pon en remojo con un poco de agua las pasas.

4. Pasados los primeros diez minutos de cocción de las zanahorias en la leche, añade el azúcar y deja cocer 20 minutos a potencia media removiendo de vez en cuando. 

5. Pasado este tiempo, añade la mantequilla troceada y sigue cociendo 15 minutos más removiendo de vez en cuando. 

6. Mientras tanto, pon a remojo las hojas de gelatina en agua. 

7. Retira las zanahorias con la leche del fuego. Escurre las pasas del agua y añade a las zanahorias. Mezcla bien. 

8. Escurre las hojas de gelatina y añade una a una mientras vamos mezclando bien. 

9. Vierte la crema en un molde cuadrado o rectangular que no sea muy alto, el mío era rectangular de 25 cm de largo, 18 de ancho y 3 cm de alto. Reserva en la nevera de dos a tres horas para que cuaje. 

10. Una vez cuajado, desmolda en una bandeja forrada con papel de horno y corta en cuadrados pequeños con un cuchillo afilado. 

11. Espolvorea con el coco rallado, con una pizca de nuez moscada y con los pistachos pelados y troceados. Reserva en la nevera hasta su consumo. 

NOTA: también puedes hacer el halva de calabaza, para ello, utiliza la misma cantidad de calabaza, pero con 300 ml de leche y 300 ml de nata. El tiempo de cocción también será menor, con 30 minutos tendrás bastante.