Páginas

miércoles, 10 de octubre de 2018

COOKIES INTEGRALES DE CHOCOLATE Y FRUTOS SECOS



Tenemos un amigo Carlos, lo podéis encontrar en Instagram como connaranja, que me sigue en las redes sociales, y siempre me dice que a ver cuando le enseño a cocinar algo porque le gusta todo lo que ve en mi blog. No sabía qué "enseñarle" a cocinar, pues él no cocina y repostería, menos aún. Así que al final, pensé en unas galletas, pues son ideales para la gente que empieza a cocinar al no llevar mucha complicación. 




Como él es muy deportista, diseñé unas galletas especiales, con harina integral, chocolate y frutos secos para darle energía para todos sus retos deportivos.
Así que una mañana de este verano, Carlos se metió en mi cocina y le salieron unas galletas riquísimas. Resultó un alumno aventajado, lo reconozco, bien aplicado. Así que por una vez en mi blog, esta vez no he cocinado yo. Lo único que yo hice fue controlar el horno, ¡¡y me pasé un pelín en el horneado!! ja, ja, vaya desastre, el alumno resultó de 10 y la profe, un poco distraída (porque no fue en lo único que metí la pata al explicarle la receta, pero eso lo dejo para él y para mi). 



Y seguimos viajando por Portugal y esta vez toca el turno de Lisboa, la ciudad de las siete colinas. Como lugar más representativo, he elegido la Praça do Comércio, una de las plazas más importantes de la ciudad, con vistas al Tajo, donde está siempre llena de turistas, y coronada por el Arco de la Rua Augusta. Siento que la foto no le haga justicia, pero no me di cuenta que apenas había hecho fotos a este lugar tan importante para los lisboetas. 


Y si Lisboa es famosa, gastronómicamente hablando, por su bacalao, sus pasteles de nata no se quedan atrás. Encontrarlos es fácil, hay locales exclusivos a su venta como este que os muestro en las fotos, pero, además, los venden en cualquier local donde vendan comidas, está en los desayunos de los hoteles y hasta te lo ponen en la comida del avión. Este típico pastelito, está por tooooodas partes. Y hay que reconocer que está riquísimo.


Otra cosa que podemos encontrar en los sitios más céntricos y en muchos locales, es el Pastel de bacalao, una especie de croquetón, con queso o si él. Estas tiendas, que están repartidas por varios lugares, es ultra moderna , muy curiosa.


El dichoso croquetón no es nada barato, a 4 euros la pieza, y sinceramente,  no me gustó nada, aunque os confieso, que a mí no me gusta el bacalao, pero  mi catador oficial de bacalao me dijo que tampoco le pareció nada del otro mundo.


Y no a la altura del pastel de nata pero casi, podéis encontrar tiendas donde venden conservas, sobre todo de sardinas, que por cierto, están riquísimas. Nosotros nos trajimos varias como souvenirs y damos fe de que son muy ricas y suaves de sabor. Esta es de la marca Comur.


Las tiendas de Conservas, son monísimas, muy vintages y cuidando el detalle al máximo. Otras de Comur, esta vez comercializadas como 1942.


Como ésta que hay en una plaza muy importante que da paso a la famosa Rúa Augusta, con temática circense, muy grande, curiosa de ver de verdad. O Mundo Fantástico das Conservas Portuguesas. 



Todas estas tiendas están totalmente orientadas al turismo, porque si las veis in situ, os aseguro que os queréis llevar todas las latas incluso aunque no os gusten las sardinas. Aunque, en realidad, encontraréis otros tipos de pescados en conserva. Las latas las encontráis a un precio desde 5 euros y de ahí para arriba, pero si vais a sitios menos turísticos, podéis encontrar precios más económicos y con la misma calidad. Hasta anchoas del cantábrico Made in Spain El Consorcio.




Y también podemos encontrar paellas y jamón serrano. Otro país más donde encuentro sin dificultad el jamón serrano.


Y si famosos son los pasteles de nata, los que sin duda más conocemos todos, son los Pastéis de Belém. En realidad son los mismos, sólo que los de Belém, son los pioneros y tienen la marca registrada. Entrar en su local, significa hacer una gran cola, y sinceramente, después de estar todos los días atiborrada de pastelitos de nata, la cola me tiró para atrás.



Pero cosas del destino, al salir de comer de un local cercano, de repente no encontré cola, así que ahí me metí a por mis pastelitos de Belém, je, je. Y nada más salir yo de comprar, la cola de nuevo. Como veis, venden más cosas, pero no vi a nadie que llevara algo distinto que no fueran los famosos pastelitos.


 Y aquí la prueba de que al final los compré. Como veis el packaging que llevan los pastelitos es importante y los acompañan con un sobrecito de azúcar glas y canela. Si me preguntáis si hay diferencia entre los pasteles de nata y los de Belém, pues bueno, tal vez si. No encontré tanto la diferencia en la crema y si más, en el "hojaldre", que sinceramente era tan hojaldrado, se veían tan bien las miles de capas, que me pareció más que era una masa philo, más que un hojaldre. Muy, muy crujiente, le daba un toque más volátil a la masa.


Y ya que estamos en materia de comidas, aquí va unas sugerencias gastronómicas si visitáis Portugal en general. Esta ensalada, la de pulpo, me la pedía varios días, en todos los sitios que la comí el pulpo estaba super tierno. Hay muchos tipos de ensaladas (que por cierto, casi ninguna lleva lechuga pero se llaman ensaladas) pero esta es rica de verdad.


No podían faltar las sardinas, muy muy grandes (por lo menos las de por aquí son más pequeñitas), pero ricas y acompañadas siempre de guarnición.


  Bacalhau com Natas, realmente rico hasta para mí, que no me gusta el bacalao, tiene un sabor sutil a bacalao y el sabor de la crema está muy bueno. Recomendado. 


Bacalao Lagareiro, otra receta estupenda. Todo el bacalao que probamos en Lisboa fue de 10, fresco y lomos bastante grandes, sin duda, su fama es bien merecida.


Comer en un restaurante lisboeta, viene a costar más o menos lo que un menú por aquí, por lo menos donde yo vivo, entre 20-25 euros por persona, con todo recién hecho y pescado fresco, eso sí, dependerá de si pedís postre o no, de la bebida y demás, pero el precio es bastante similar al de España.
Y también podéis encontrar otras opciones, claro está, como el restaurante de Jamie Oliver, que por cierto, teníamos prácticamente al lado de nuestro hotel, pero que no visitamos, pues ya llegábamos tarde y nos apetecía cenar algo más ligero que comer comida italiana. Aún así miramos su carta y de precio está genial, así que comer en un restaurante de un chef tan famoso, no os va rascar el bolsillo.


Donde recaíamos a cenar  algo ligero todos los días fue en este lugar Cister, estaba al lado de nuestro hotel, los camareros son super amables, y el precio super bueno. Es una pastelería, bueno, allí casi todo son pastelerías pero donde tienen mesas para desayunar, comer o cenar. El café de este local está muy bueno, tan sólo sesenta céntimos y los pasteles muy ricos. Sus hamburguesas son distintas y más ligeras y baratísimas. Eso sí, podéis pediros la hamburguesa de la casa, pero todo parecido con una típica hamburguesa es nulo, pero muy rica.


Y por último, un licor estrella de Lisboa, Ginja, un licor dulce de guindas. Cuando paseas por el barrio de Alfama, que recuerda un poco a las calles empinadas del Albaicín de Granada, con sus escaleras y sus cuestas, pero que te salen mujeres ancianas vendiéndote la Ginja casera, y que te recuerda a Combarro, en Galicia, cuando también salían las mujeres mayores de sus casas intentando vender a los turistas su crema de orujo, no dejas por menos de sonreír de qué distintos y qué iguales somos cuando en diferentes países, ves costumbres similares.


Y aquí ponemos punto final a mi viaje por Portugal, espero que no sea el último viaje a este país. Suerte tenéis amig@s bloguer@s cuando decís que tenéis a este país a un pasito y lo visitáis de vez en cuando.
También me podéis acompañar a un viaje gastronómico por Sintra, Londres, Manchester, York, Budapest, Praga y Viena.


INGREDIENTES: 12 galletas  PREPARACIÓN: 30 min  REPOSO: 30 min  COCCIÓN: 12 min

-125 gr de chocolate negro para postres
-50 gr de pistachos pelados
-25 gr de orejones (3 ó 4)
-100 gr de panela (o azúcar moreno en su defecto)
-100 gr de mantequilla sin sal
-1 huevo
-100 gr de harina integral
-50 gr de harina de trigo común
-1 cucharadita de levadura química en polvo
-50 gr de chips de chocolate blanco (o trozos de chocolate)


1. Trocear y fundir el chocolate negro para postres en el microondas poco a poco y removiendo cada vez que lo saquéis del microondas hasta que quede sin grumos. Reservar.



2. Picar los pistachos y los orejones en trozos no muy pequeños. Reservar.


3. Mezclar en un bol la panela junto con la mantequilla fría cortada en trocitos. Incorporar el huevo y el chocolate fundido. Mezclar bien con ayuda de una espátula. 



4. Añadir los dos tipos de harina junto con la cucharadita de levadura en polvo. Mezclar.



5. Incorporar la mayoría de los pistachos troceados y los chips de chocolate blanco. Dejaremos unos pocos para decorar. Integrar bien con las manos. 


6. Formar una bola con la masa, envolver en papel film trasparente y dejar reposar en la nevera media hora. 



7. Precalentar el horno a 180º C. Forrar una bandeja con papel de horno. Coger porciones de unos 40 gr y formar las galletas. Para ello, primero haremos una bola que luego aplanaremos en la bandeja con la palma de la mano. Dejar las galletas separadas entre sí, al hornear suelen crecer. Os saldrán unas 12 galletas aprox. 



8. Decorar con los trozos reservados de chocolate blanco, pistachos y los orejones. Hornear 12 minutos con calor arriba y abajo a 180º C. Calientes estarán muy blandas, así que retirar con cuidado y dejar enfriar en una rejilla. 



NOTA: Podéis utilizar la harina que deseéis, incluso ponerla toda integral, o cambiar el tipo de harina, como de espelta, avena....
Si no tenéis chips de chocolate blanco podéis hacerlos en casa. Fundir poco a poco el chocolate blanco en el microondas e ir removiendo cada vez que lo saquéis del microondas. Introducir en una manga pastelera con una boquilla pequeña redonda. En una bandeja forrada con papel de horno hacer pequeños montoncitos. Meter en la nevera hasta que endurezcan. 



30 comentarios:

  1. Qué delicia de cookies, dan ganas de probarlas. Qué recuerdos de Lisboa, a mi marido y a mí es una ciudad que nos encanta. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Hola!! Yo no conocía esta ciudad y también me ha enamorado.
      Las cookies están riquísimas, te animo a que las pruebes. Besitos.

      Eliminar
  2. No sé si me gustan más las galletas o el recorrido gastronómico por Lisboa. En cualquier ciudad que visitas, si te alejas de los núcleos turísticos encuentras los productos típicos a precios muchísimo más baratos. Igual ocurre con los restaurantes aunque bien es cierto que no siempre hay tiempo para alejarse un poco porque vamos corriendo de un lado a otro. Yo también creo que son muy afortuandos los que tienen el país luso a un paso.

    ¡Besos mil!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Hola Cuca!! Pues sí, tener un país como Portugal tan cerca es un privilegio, si yo viviera más cerca, sin duda, lo visitaría mucho más a menudo. Y es que cuando dispones para visitar un lugar unos días limitados no te da tiempo a todo, es imposible, y muchas veces te pilla comer donde la gente sólo cae por casualidad, no por su buena cocina. Nosotros tuvimos suerte, en Lisboa comimos en todos lados maravillosamente bien. Besitos.

      Eliminar
  3. Tengo muchísimas ganas de visitar Lisboa y Portugal, en general. Siguiendo tus indicaciones nos hará mucho más fácil el viaje. En cuanto a las galletas me parecen ideales, muy buenas de sabor y un aporte extra para esas excursiones que nunca debemos dejar de hacer y compartir con los demás. Besines!!!

    ResponderEliminar
  4. Isabel he gozado con tus cookies y con tu recorrido lisboeta, adoro Lisboa, es una ciudad de ensueño, en la que disfrutamos unas estupendas vacaciones de quince días, y en las que te puedes imaginar, no nos quedó ni un solo rincón por descubrir. Los Pastéis de Belém los compramos y son un placer divino, a mí es que me gusta el hojaldre y la canela a más no poder. No sé si estuviste en el café A Brasileira, un lugar emblemático para todos los amantes del café y la lectura, o para una golosa chocolatera como tú, la pasteleria Suiza en la Praça do Rosio, es una gozada donde no sabes qué maravilla vas a pedir, una locura donde merendar o desayunar sin contar calorías se convierte en una experiencia casi religiosa, ¿Ja, ja, ja!
    Y del bacalao, yo también diría lo mismo, los portugueses lo cocinan como nadie, y ni en un solo sitio donde lo comimos, nos defraudó.
    Bueno seguro que tu alumno no podría haber encontrado mejor profe que tú, cocinar contigo tiene que ser alucinante, porque aunque cometas algún fallito, para los ojos de gente nada puesta en repostería, seguro ni se dan cuenta de ello.
    Me alegro que hayas disfrutado en tu viaje, y que lo compartas con nosotros.
    Besos

    ResponderEliminar
  5. Menuda suerte la de tu amigo con una profesora tan buena en repostería, si se os presentó algún problema no lo parece en absoluto, pues las galletas os quedaron perfectas, bonitas y riquísimas con el chocolate y los frutos secos, muy de la época también.
    La semana pasada se me olvidó poner algo de vuestro viaje y que amablemente nos has enseñado por fotos, hoy no me quiero ir sin decirte que las blogueras vamos cargadas con la cámara a todas partes, viendo los lugares a través de ellas, pero las cocineras además nos empapamos de todo lo que huela a gastronomía, así has inmortalizado las mejores y más típicas recetas de la zona y más de una se habrá venido contigo para hacerla. Hoy te felicito por tus galletas y por tu viaje, da gusto repasar ambas cosas en la tranquilidad del otoño.
    un beso.

    ResponderEliminar
  6. Isabel,me he leido de " pe a Pa " tu estancia en Lisboa y tus comentarios sobre las recetas portuguesas .......el Pastel de Belen me encanta,y más tus cookies integrales de chocolate ,que horas más divertidas en la cocina habéis pasado.....seguro jajaja
    Muchos besitos¡¡

    ResponderEliminar
  7. Hola Isabel esa galletas a tu amigo le han quedado perfectas, claro que siendo una de tus recetas no se puede esperar otra cosa, seguro que lo pasasteis la mar de bien, los dos en la cocina.
    Sabes yo no he estado nunca en Portugal, Lisboa dicen que es muy bonita y con lo bien que explicas el recorrido que hiciste por allí, me puedo hacer una ligera idea de cómo es y como es su comida, creo que cuando visite esta ciudad me va a gustar.
    Un beso grande

    ResponderEliminar
  8. Hola guapa!!
    oye que tu no te acompañas de cualquiera, vas a alumnos aventajados, cocinar no sabrá, pero hija le han quedado unas galletas para hacerlas el solo que ni el mejor pastelero, le han quedado monísimas, que pintaza tienen, serían un visto y no visto.

    Portugal me encanta, a Lisboa no he bajado, por cercanía vamos a menudo y me encanta ir y ver sus tiendas, sus costumbres y su comida, la ultima vez hemos comido un bacalao de sacarle el sombrero, éramos muchos y habíamos reservado en un sitio que ya conocíamos y estaba de cine, nos ha encantado. Tu te lo has pasado en grande y para eso son las vacaciones y los viajes, lo malo es regresar a la rutina, aunque esto va a ser siempre así a no ser que nos toque la primitiva jaja...Bess

    ResponderEliminar
  9. Hola, pues es cierto que un alumno aventajado y la mejor maestra es una combinación explosiva. JAJAJ!!! Así han salido esas galletas, deliciosas!!!
    Qué bonita ciudad es Lisboa, he estado dos veces, es muy especial y se come de maravilla. Un beso!!!

    ResponderEliminar
  10. Isabel, me recuerdas a varios amigos y amigas que siempre dicen lo mismo y no son muy de cocinar, a veces una se siente como bicho raro, porque ahora a la gente como que la cocina no les gusta nada, nada. Claro está, tu alumno ha tenido el honor de aprender de ti y mira que estupendas galletas, me parecen deliciosas. Yo oficialmente hace mucho no preparo unas que sean galletas para guardar y comer. Sí que he realizado galletitas que acompañan recetas, pero no he vuelto a realizar galletas protagonistas. Me gusta ese contraste de frutos secos con chocolate y harina integral. Se ven estupendas. Del viaje, que maravilla es poder viajar, de los destinos que me encantaría conocer Portugal es uno es ellos, la música, las personas, el idioma que es más sonoro en cuanto a las sss, con respecto al portugués de Brasil, en fin, me gusta mucho. Gracias por compartirnos cada foto, por llevarnos contigo de viaje, por ser nuestra guía turística. Siempre se conoce y de manera virtual con gustos similares de cocinillas, pues vamos a lo que vamos, a disfrutar de sabores dulces y salados. Me encanta que a pesar de que no te guste el bacalao, pues te mandas y pruebas, eso me parece estupendo. Todo se ve delicioso, un placer conocer así sea de manera virtual lugares y calles que capturaste. Besos bonita y me llevo las galletas ;)

    ResponderEliminar
  11. Hola Isabel, cuantas cosas bonitas nos enseñas hoy, me está entrando un hambre... me quedo con todo, con las galletas deliciosas, con el croquetón, lo jamones y los dulces, es que todo se ve de lujo. Gracias por compartir estas delicias, y por supuesto que me llevo mis galletas virtuales para el postre. Un beso :)

    ResponderEliminar
  12. Tu amigo Carlos tiene que estar orgulloso de tener tan buena profesora, no lo dudo. A mí me pasa igual, siempre que me pongo a cocinar con alguien para enseñarle una receta es cuando peor sale. Tu viaje por Portugal parece que lo estamos viviendo los demás un poco ya que tu reportaje es una auténtica delicia. Bss mil

    ResponderEliminar
  13. Hola Isabel. Estoy convencido que a tu amigo estas galletas le han debido saber a gloria. Ha tenido mucha suerte al tener de profesora tan distinguida cocinera como lo eres tú. Me quedo con las ganas de ser tu aprendiz jj.
    Unas galletas que deben estar muy exquisitas. Encontrar esos tropezones de chocolate y orejones es estupendo, me gusta jj. Unas galletas para disfrutar.
    También disfruto con tu reportaje sobre Lisboa ya que me ha traído buenos recuerdos de cuando estuvimos allí. Me alegro de que por fin el bacalao no haya sido congelado jj. Te ha llamado la atención el tamaño de las sardinas, me encantan. Debe ser el mar porque recuerdo que en una ocasión pedí lenguado y se salía del plato jj. Me alegro de que lo hayas pasado de fábula.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  14. Hooooola Isabel, tanto tiempo. Aunque creo que tú también casi vienes regresando de tus vacaciones del verano. Yo este año pensaba hacer lo mismo, pero me adelante al verano, tomé vacaciones demás, jajaja.
    Qué risa me ha dado que ha salido más aplicado el alumno que la maestra, jajaja. Pero así doraditas es como me gustan las galletas, eso les da sabor.
    Tu viaje,¡increíble! Quiero probar esos pasteles de Belém y el pulpo. Con lo que me fascina un pulpo bien tiernito.

    ¡Miles de besos, nos leemos pronto!

    ResponderEliminar
  15. Un alumno muy aplicado, las galletas de 10y muy energéticas, probé las croquetas XXL y a mi tampoco me gustaron,
    Besitos

    ResponderEliminar
  16. Hola Isabel, me ha encantado ver tu viaje por Lisboa, tenía muchas ganas de ir pero ahora que he visto tus fotos, tengo más ganas aún. Qué monería las latitas de sardinas, son increíblemente bonitas, me las llevaría todas jaja. Daría hasta pena abrirlas para comérselas porque luego habría que tirarlas. Guardaré en un rincón de mi cabeza todas tus recomendaciones para cuando vaya a visitar esta maravillosa ciudad, son tantos los sitios que quiero ver, espero que algún día me decida ir sí o sí, tengo a mi chico que es demasiado casero (no sé si se dice así, en fin, hay que luchar para sacarle de su pueblo jaja).
    Tus cookies me parecen de lo más rico que he visto y es verdad que para una persona novata en la cocina, es una de las recetas más fáciles de preparar, me ha hecho bastante gracia que la profe metió la pata con el horno jaja, cosas que pasan... Para empezar reposteando son ideales y sobre todo porque las cookies que has elegido para Carlos son muy saludables ;) Un besote y disfruta del finde...

    ResponderEliminar
  17. Isabel, en primer lugar, tus galletas me parecen maravillosas no importa los inconvenientes que hayas tenido. Luego, seguimos disfrutando tu viaje por Portugal que me parece un país maravilloso que me gustaría visitar alguna vez, las tiendas parecen boutiques, qué bellas ni pensaría uno que venden sardinas allí, jaja! Y esa ensalada de pulpo literalmente me hizo la boca agua!
    Y los pastelitos, pues que rico que hayas probado "los verdaderos" de seguro estaban ricos también.
    He disfrutado mucho tu entrada de hoy, realmente es un gusto viajar!
    Besitos!!

    ResponderEliminar
  18. Con tu completa entrada de hoy, me has recordado mis viajes a Portugal, tanto su paisaje como su gastronomía, me encantan, además me recuerdan a mi tierra: Galicia.
    Aunque no soy golosa, no he dejado de tomar con el café un pastelito de natas, son deliciosos.
    Cuando estuve en Lisboa, también paseé por esa larga calle que da a la Plaza del Comercio con vistas al Tajo, era un día de calor y muchos turistas, sentados en las escaleras, contemplaban esa inmensidad de agua con ganas de refrescarse.
    Pero como dices que son tan fáciles tus galletas, perdono las natas y me quedo leyendo detenidamente su preparación, tienen que estar deliciosas, como todo lo que haces.
    Estoy contenta de volver a visitarte.
    Cariños.
    Kasioles

    ResponderEliminar
  19. Hola Isa!! Me encantan las galletas caseras (del sabor que sean) y tu alumno aplicado ha preparado genial esta receta, son muy apetecible.
    Pero déjame decirte que me ha gustado más tu viaje por Lisboa; para no gustarte el bacalao habéis probado varias recetas del mismo, para mi el plato portugués por excelencia es el bacalao con nata, que tanto hacemos en casa y el bacalao a la brasa, que se prepara más por el sur y que siempre te sirven (como casi todos los platos) acompañados de arroz blanco muy aromatizado y patas y otras verduras hervidas. La verdad es que los portugueses son de buen comer Porque los platos suelen ser enormes!. Las tiendecitas de conservas así como las pastelerías antiguas son preciosas y se te hace la boca agua hasta cuando no te gusta realmente lo que venden, pero es verdad que están enfocadas al turismo, y en cualquier tienda pequeña de barrio tienes los mismos productos de marcas portuguesas que nos son totalmente desconocidos a precios baratisimos.
    Los pasteles de Belén o de nata (son lo mismo) llevan el nombre registrado o no dependiendo de que el hojaldre de su base sea casero al estilo portugués (más parecido a la pasta philo) o industrial, de ahí que apenas notarás diferencias. También es deliciosa la bollería casera y la diferencia de precio es brutal! 1 docena de pastels do Belem en una panadería te pueden salir por 2 o 3 euros, lo mismo que una sola pieza en una cafetería céntrica. Igual pasa con sus conservas, quesos y pates. En los pequeños mercados no son tan vistosos ni llamativos pero son "mas portugueses" por así decirlo y más asequibles. No voy a aburrirte más con la gastronomía que tu misma has podido disfrutar pero supongo que ahora entiendes mejor porque me gusta tanto la comida portuguesa, yo, amante del bacalao, las sardinas, la comida a la brasa y las cremas y consomes que también hacen de forma exquisita... Lo reconozco, Portugal es un país fascinante con muchos contrastes entre lo clásico y moderno, las decoraciones vintage, los monumentos o edificios de siglos pasados, el tranvía de los años 40 y las galerías de arte super modernas, las casas coloridas que te recuerdan la pequeña Habana, la actualidad y modernidad de sus grandes ciudades y los pueblos más rurales y tradicionales (como los que ocupan el centro y norte de España). Tan distintos y tan iguales ambos países y con cosas maravillosas por descubrir en ambos (no nos quitemos galones, jeje).
    Un Enhorabuena para tu chef invitado y un besote enorme para ti. Hasta la próxima!!

    ResponderEliminar
  20. Que galletas más ricas Isabel, me ha gustado mucho el post para volver a enamorarme de Lisboa jajajaja

    ResponderEliminar
  21. Mi querida amiga, ya veo que eres una maravillosa profesora y que tu alumno va aprender mucho de ti, me ha encantado el reportaje de Lisboa una ciudad preciosa que tengo la suerte de conocer y me encanta. Mil besicos cielo

    ResponderEliminar
  22. ¡Hola Isabel! Pero ¡Qué nivel! ya vamos dando clases y todo... me pido hacerte una visita que yo también quiero cocinar contigo... ahora... ya te digo.. que seguro se nos quema lo que sea.. de la chachara que nos vamos a pegar, no nos vamos a dar cuenta de horno, ni de ná!!! jajaa...Ahora reirnos... una hartá!!
    Bueno.. a mi me gustan mucho esas galletitas... me las comería encantada... El viaje una maravilla... que ganas de irme para allá! Un beso corazón.

    ResponderEliminar
  23. Hola Isabel! Las galletas tienen un aspecto delicioso, tomo nota de la receta y de la info que compartes sobre Portugal, a ver si voy este año.
    Te espero pronto por mi blog. Bss

    ResponderEliminar
  24. Isabel, un alumno aventajado sin duda, también contamos con la suerte del novato que eso siempre ayuda.
    Lisboa, ciudad preciosa y llena de gente amable, que estoy segura que lo da el propio idioma, le pasa como al italiano, que es una lengua respetuosa por el uso que tienen del usted y por el saludo. Me parecieron supereducados para lo que está cayendo por aquí que cada vez el uso del idioma es más sinóptico. En fin, un pueblo que da gusto.
    Bueno, unas galletas 🍪 muy apetecibles y no muy complicadas, cosa de agradecer. Hace mucho que no hago galletas y a veces me entran ganas de hacerlas en casa, las mejores sin comparación. Ya guardo tu receta.
    Un post precioso y lleno de información. ¿Qué mas queremos?
    Muchos besos y buen resto de semana

    ResponderEliminar
  25. Umm, esas galletas tienen que estar buenísimas! tu alumno seguro que las vuelve a preparar muchas veces. El reportaje de Lisboa me ha encantado, las fotos, tus recomendaciones, las tiendas de conservas tan bonitas.. ¡en fin que es para volver!
    Muchos besos

    ResponderEliminar
  26. Hola Isabel!!!!!
    Las galletas tienen una pinta espectacular, me encantan los frutos secos y en estas cookies de chocolate, tiene que estar.....se me hace la boca agua.....
    Una visita guiada por Lisboa de 10!!!

    Mil gracias, un besazo

    ResponderEliminar
  27. Anda!!! me había pasado está estupenda receta????? imperdonable. Estas galletitas con su chocolate y frutos secos son una tentación elevada al cubo. Ya veo que te gusto Lisboa, la verdad es que es preciosa la ciudad y su gastronomía es muy buena y saludable, además muy asequible para nuestros bolsillos. Yo también disfrtue en su día . Besos.

    ResponderEliminar
  28. Hola Isabel
    Las galletas estupendas, es normal, hay buena maestra, sin duda tenían que salir.
    El reportaje de Lisboa estupendo, viendo las fotos dan ganas de viajar, es rica en su gastronomía y la ciudad se ve preciosa, desde luego es un sitio para ir a visitar y pasar unos días disfrutando de todo lo bueno que tiene.
    Besos.

    ResponderEliminar

¡¡Gracias por la visita!! Me encantaría que me dejaras un mensaje y me comentes si te ha gustado la receta. Si tienes alguna duda, también me puedes escribir al siguiente correo rescalvo7@gmail.com
Por cierto, no participo en cadenas de premios, ¡¡gracias!!