Tartaletas de Calabacín y Pesto

Después de unas pequeñas vacaciones regreso de nuevo, esta vez con una receta salada. Me encanta el hojaldre, pero sí es cierto que lo como muy de vez en cuando y está riquísimo tanto con recetas dulces como con saladas, por eso, en esta ocasión, lo he preparado en una receta salada. También me encantan los calabacines, los como todas las semanas y esta vez, los he vestido un poco de fiesta con el hojaldre y el pesto. No suelo comprar pesto ya preparado, prefiero hacerlo en casa, pero como no encontré albahaca, decidí comprar uno que no me entusiasmó en exceso, sigo prefiriendo el casero, pero bueno, al no encontrar la albahaca, pues eché mano de lo preparado.

Galletas Recubiertas con Nueces y Rellenas de Ganache de Chocolate

Os quiero dejar una receta dulce, estas galletitas para que os vayáis sirviendo mientras llegáis al blog, pues la semana que viene no habrá publicación, estaremos en la semana fallera y por fin, voy a disfrutarlas por todo lo alto desconectando por completo. También, al tener toda la semana festiva, aprovecharé para hacerme unas pruebas para mis ojos. Me seguís preguntando por mis ojos pensando que ya estaré perfectamente bien, pero nada más lejos de la realidad, pues la segunda operación fue mejor respecto al dolor pero me quedé viendo peor. Van a hacerme unas pruebas para ver qué le pasa a mis ojos, pero la cosa no funciona. El problema de la visión borrosa es que tampoco me lo solucionaría poniéndome unas gafas, y la verdad, mi miedo es no poder volver a ver mejor y que no pueda conducir, me partirían en dos, pues necesito conducir diariamente para ir y volver del trabajo, además, hago cuatro viajes, pues regreso a casa para comer y vuelvo. 

Bollitos de Leche con Mantequilla de Ajo Negro

Me gusta meterme en harinas, pero es cierto que últimamente me da pereza esperar tanto para elaborar una receta, no por el trabajo de amasar, que además, en mi caso, lo hace la amasadora, es más el tiempo de levados, pero luego lo piensas, y mientras la masa leva, puedes hacer otras cosas. Y últimamente, tenemos los días grises y lluviosos y qué mejor que ponerte a hornear, y más si es algo que te recuerda a la infancia, como los bollitos de leche. Los que yo comía eran alargados y bastante blanquitos, pues yo los he hecho redondos esta vez y me han quedado morenitos, pero por dentro, blancos impecables.