miércoles, 26 de octubre de 2016

ROSCOS DE VINO



Os he contado varias veces que crecí en un lugar donde no había tradiciones, que cada uno tenía las propias de su casa, pero ninguna en común con el resto de habitantes. Así que nunca celebré Todos los Santos, ni la noche de los difuntos ni nada de eso. Por no tener, no teníamos ni cementerio, pero allí era raro que alguien muriera, como no fuera alguna persona mayor que casualmente, le tocaba pasar el mes con algún familiar y por eso se encontraba allí.
Aunque, creo que al primer entierro que fui (sólo a la iglesia), si que fue de alguien joven, un guardia civil, padre de un niño, con el que siempre jugaba y que después del entierro, nunca más volví a ver. Se tuvieron que ir de allí a empezar una nueva vida. Mi amigo tendría sobre ocho años, no más.




Por eso, cuando con 21 años me fui a vivir a otro lugar, lo que más me llamó la atención, fueron sus tradiciones y costumbres. Aún recuerdo la primera Semana Santa, con aquella devoción que sacaban las imágenes y vestidos de capuchinos. O las Verónicas, caminando toda la procesión descalzas y con los pies encadenados. ¡¡Cómo me llamó la atención!! Aunque a mi siempre me habían dicho que la gente buena era la que iba a misa y creía en Dios, pero a mi no me cuadraba mucho, ver a personas que nunca consideré buenas vestidas con la túnica en procesión. O esas Verónicas que hacían promesas para que se les cumpliera sus deseos vestidas de negro y con la cara tapada para que no se les reconociera y hacer su penitencia en silencio, pero que luego llevaban a su familiar al lado, con lo que el reconocimiento sobraba. Pero en fin, a mi no me hagáis mucho caso, pues al fin y al cabo, yo era una niña "salvaje" y me había criado en un lugar sin costumbres ni tradiciones. 



Y ahora llega Halloween, que por cierto a mi si me gusta, y ya que no tengo tradiciones, alguna tengo que adoptar, ¿no?, ja, ja. Bueno, a ver, me hace mucha ilusión eso de que los niños llamen a la puerta disfrazados y te pidan chuches, lo prefiero a que te pidan dinero en nochebuena y ni te canten un villancico (eso si que lo hice de pequeña, por cierto, pero iba con pandereta y todo). Así, que el primer Halloween que pasé  donde vivo actualmente, compré un montón de chuches y me estuve esperando toda la tarde con una calabaza de fieltro llena de caramelos de truco o trato e intentando frenar mis impulsos de meterle mano a las chuches. Al final lo tuve que hacer, pues nadie llamó a mi puerta. ¡¡Vaya chasco me llevé, ja, ja!!
Al año siguiente no me di por vencida y volví a cargar con las chuches, y mi sorpresa fue cuando un día antes de Halloween llamaron a la puerta un grupo de niños que me pidieron chuches, ¡¡casi asusto yo a los niños de la alegría que me dio verlos, ja, ja!!
Y bueno, aunque adoptemos nuevas tradiciones, también pienso que no hay que perder las nuestras (buenos, quién las tenga, recordar que yo sigo "salvaje"), así que hoy no he optado por una receta de Halloween, sino una típica de estos días, unos típicos roscos de vino muy socorridos tanto para Todos los Santos, Navidad o Pascua.





INGREDIENTES: 20 roscos  DIFICULTAD: Fácil  PREPARACIÓN: 30 min  COCCIÓN: 15 min

-200 ml de aceite de oliva suave o de aceite de girasol
-la piel de medio limón
-450 gr de harina
-150 ml de vino moscatel
-100 gr de azúcar
-1/2 cucharadita de anís en grano
-azúcar para espolvorear
-harina

1. Calentar el aceite junto con la piel de limón hasta que empiece a humear. Apartar del fuego y dejar enfriar dejando la piel de limón en el aceite para que infusione.



2. Tamizar en un cuenco la harina y verter el aceite frío ya sin la piel de limón y mezclar con una cuchara de madera. 



3. Añadir el vino, el azúcar y los granos de anís. Mezclar con la cuchara de madera.



4. Enharinar una superficie de trabajo y volcar la mezcla encima. Amasar con las manos hasta conseguir una masa lisa. 



5. Precalentar el horno a 200º C. Forrar una o dos bandejas de horno con papel sulfurizado.
Coger pequeñas porciones de masa, redondear con las manos y darles forma de rosco. Ir colocando los roscos en la bandeja. Hornear a 200º C con calor arriba y abajo  15 minutos o hasta que estén doraditos.



6. Nada más sacar los roscos del horno y con cuidado de no quemarnos, pasar los roscos por azúcar e ir dejándolos en una rejilla para que terminen de enfriarse. 



NOTA: Guardar los roscos en una caja y cubrir con un paño. Duran varios días. 







54 comentarios:

  1. ¡Hola niña salvaje!

    Te leo y me veo reflejada en esa reflexión que haces acerca de la gente buena y esas teóricas Verónicas "anónimas" y que lo no lograbas entender. Yo tampoco lo entendía y mira que me crié en un pueblo con costumbres y tradiciones y en un colegio de monjas. Una lástima que mis padres me enseñaran a ver, oir y pensar (que no callar) y sacar por tanto mis propias conclusiones.

    Me gusta que adoptes tradiciones que te gusten sin importar su procedencia. A mí no me gusta que Halloween eclipse al día de Todos los Santos pero entiendo que pueden convivir en armonía y que es más atractivo para los niños que no saben decir que no a una chuche (yo tampoco ji ji ji)

    Estos roscos de vino me han encantado. Fíjate que nunca los he hecho en casa porque yo pensaba que eran fritos (y ya sabes que a la repostería frita le tengo mucho respeto) pero al ver que son al horno ¡creo que me voy a animar! ¡Otra receta que me llevo al bote!

    ¡Besos mil y feliz Halloween!

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    1. ¡¡Ja, ja, me ha hecho gracia eso de niña salvaje!! Bueno, me he moderado mucho, el tiempo tampoco pasa en balde, y cada vez, por desgracia, veo que ya voy siendo adulta por mucho que me pese.
      Vamos admitiendo nuevas costumbres aunque no nos demos cuenta, pues aquí, por ejemplo, en navidad, sólo se ponía el belén, y el árbol de navidad fue una copia de algún otro país y que ahora nos parece más que nuestro. Supongo que con Halloween también pasará lo mismo. Mira, siendo fiesta, yo adopto lo que sea, ja, ja.
      Y siiiii, los roscos son al horno. Y a pesar del aceite que llevan en el interior, que no es poco, no quedan aceitoso, que es lo que me repele de los fritos. Besitos, ¡¡y gracias Cuca por entender mi lado salvaje, ja, ja!! Besitos.

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    2. Yo también me crié en un lugar con tradiciones y fui a colegio de monjas y mis padres me dieron una excelente educacion .Pienso por mi misma y genéticamente me tocó la lotería de un CI bastante alto. Soy creyente y a las monjitas les tengo un cariño especial y no sólo por lo bien que se portaron con mi familia cuando atravesamos por grandes dificultades económicas.En cuanto a halloween, prefiero celebrar el día de todos los santos y no abro la puerta a nadie disfrazado pidiendo chucherías. Es mejor llenar una bolsa del súper con artículos de primera necesidad y algún capricho y dársela a una persona necesitada.La mirada de sorpresa y gratitud que te dan lo supera todo. Es mas divertido dedicarle tiempo a tus sobrinos y sacarles mil sonrisas, o mas humano pasar un rato con un vecino mayor que está depre y necesita compañía.Chucherías para niños que tienen todo lo que quieren en nombre de una tradición madre un USA? No gracias.
      PD: si se le echa leche a los roscos se ponen duros en seguida( por si alguien se plantea variar la receta)

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    3. ¡¡Hola Anónimo!! Siento si mi entrada de hoy te ha molestado, no se trataba, sin duda, de ofender a nadie, sé que con el fútbol, la política y la religión, lo más sensato es no meterse, pues cada uno tiene sus ideas, y todas son siempre válidas. Afortunadamente el tiempo me ha enseñado a respetarlas y ver que yo no tengo la verdad absoluta.
      Para nada mi intención era meterme con la iglesia, o las monjitas, sino más bien, un tirón de orejas hacia las personas que piensan que son de moral intachable y luego dejan mucho que desear, supongo que habrás conocido a alguna. Y en cuanto a lo de las procesiones, tengo que reconocer que la primera vez me llamó mucho el fervor y la pasión, pero como me llamaron la atención que hubiera "quintos" que hacían arcos de flores en semana santa y pusieran ramos en las ventanas de sus novias, por ejemplo, son tradiciones que nunca había conocido.
      En una época de mi vida, también tuve que ir a un colegio de monjas, fue sólo un año, y siempre fueron correctas conmigo. También de los 16 a los 18 fui catequista, aunque fue más por deseo del cura que mía, lo reconozco, ja, ja.
      Respecto a ayudar, bueno, he estado en cruz roja durante casi quince años, porque empecé siendo adolescente y ayudábamos tanto a niños como a personas mayores, y con éstos últimos fue una experiencia muy bonita. Hoy en día colaboro con Cáritas entregando comida asiduamente, te aseguro que ellos tienen todo mi respeto, pero eso no quita, que haya cosas de la Iglesia Católica que no me gusten y que pienso que podrían mejorar y abrirse un poco más.
      Sobre lo del coeficiente intelectual, mejor no hablamos, pues me hicieron varios test en el instituto, y nunca me dieron el resultado, seguramente fue para no avergonzarme, ja, ja.
      Gracias por la visita, el comentario y el apunte de no añadir leche a la receta. Besitos.

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    4. Hola Anónimo. Repaso mi comentario y no veo que haya nada en él que pueda levantar ampollas. Le comentaba a mi amiga Isabel que a pesar de haber crecido en un ambiente diferente al que ella nos relata hay cosas que no entiendo no de la iglesia católica sino de algunos que dicen llamarse (muy) católicos y que según lo que se me enseñó a mí en mi entorno familiar y escolar distan mucho de acercarse a lo que pretenden ser.

      No obstante en este país parece ser que por muchos aires de modernos que nos demos aún no sabemos aceptar que haya personas que tengan una opinión diferente o se cuestionen algunas de las cosas que ven a diario, porque aquí todas las opiniones que se han vertido han sido desde el respeto y sin menospreciar ni insultar a nadie ni a nada.

      Y con las tradiciones pasa como con todo. Algunas perduran, otras se pierden y los nuevos tiempos arrastran tradiciones de otros países que nos pueden gustar más o menos, pero el hecho de abrir la puerta a unos chiquillos que pidan caramelos no es óbice para colaborar con un banco de alimentos o echar una mano a algún vecino o conocido que por su edad o situación personal lo necesite. No veo el impedimento para que alguien festeje Halloween y además tenga conciencia social.

      Gracias por tu comentario, porque nos abre la posibilidad de entablar un bonito debate desde diferentes puntos de vista.

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  2. Muy ricos esos rosquitos,yo no soy de día de los Santos y en casa no llega Halloween,aunque si he ido a alguna celebración con las peques de la familia¡¡¡¡
    Muchos besitos ¡¡¡¡

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    1. ¡¡Hola Victoria!! Con los niños es bonito celebrar todo. Nosotros nunca celebramos Todos los Santos porque mis abuelos estaban enterrados a cientos de kilómetros, así que para nosotros no dejó de ser más que un día normal. Pero eso si, a cualquier comida típica, yo me apunto. Besitos.

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  3. Isabel hablar de costumbres y tradiciones, nos puede dar para escribir un libro, jejeje... Pero hoy no toca, ¡que le vamos a hacer!
    De lo que si hablaría contigo es de roscos, rosquillas o como se les quiera llamar, en casa las hacemos por Navidad, antes cuando mi madre podia, las hacíamos en cualquier época del año, ya que se hacen en un vistony no visto, aunwue en casa las hacemos fritas, solemos hacer tantas, que el horno no daría abasto.
    Además bien tapadas se conservan en buen estado y sinnecesidad de frigorífico, más de dos semanas, doy fe porque en casa lo hemos comprobado. Claro que recién hechas tienen una textura diferente, y conforme pasan los días, cambian pero aún así siguen estando deliciosas.
    Yo sí soy de costumbres, lo que me acaba de recordar la hora que es y me voy a tomar mi ratito del café, ¿me invitas a un rosquito? Para ti un cacao, o una infusión, que se que el café no es lo tuyo.
    Besos y que las disfrutes.

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    1. ¡¡Hola Concha!! Mi madre, en casa, también solía hacer rosquillas fritas, sobre todo las hacía para semana santa, pero no son estas. Las de hoy son horneadas porque la receta lo es. Sé que hay muchos tipos de recetas, y muchas son fritas, casi, casi la mayoría. Donde vivo ahora, son típicas hacerlas con anís o aguardiente, esas me encantan, para mi son las mejores, pero como la hacen con la misma masa de las empanadillas que ya puse en el blog, hoy me he decidido por estas con ese toque de anisillos. Besitos.

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  4. ¡Hola! 🍬
    Me encanta estas rosquillas, mi madre siempre me las hacía pero nunca he sabido hacerlas jeje, me apunto la receta para aprender :). Me encanta la entrada
    Te acabo de seguir jeje, ¿Podrías seguirme también devuelta por favor?
    👻 ¡Feliz Halloween! 🎃

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    1. Muchas gracias Arual por la visita, el comentario, ¡¡y quedarte como seguidora!! Ahora mismo voy a conocer tu blog. Besitos.

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  5. Hola Isabel!! en casa recuerdo que mi madre siempre ponía la víspera de los santos unas tacitas con agua y aceite encima y sobre estas unas lamparillas (se llamaban a si) que se encendian como una velita y duraban mucho ,ella decía que era para iluminar a nuestros seres queridos .y luego nos hacia buñuelos y rosquillas parecidas a las tuyas pero fritas , yo me quede con la costumbre de los buñuelos
    tus roscos me gustan por que al ser de horno tienen que quedar mas ligeros ,bueno y por que tienen una pinta....
    besitos

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  6. En casa nunca hemos sido de tradiciones. Puede que porque mis padres siempre han trabajado en hostelería, y claro, cuando era fiesta ellos siempre trabajaban... Ahora sí, por el halloween en España no paso :P jaajaajaj... Aquí también han cogido la costumbre americana e incluso carvan calabazas, muchos las ponen en la ventana (aquí se lleva mucho decorar las ventanas) o en la puerta de las casas... Pero va por zonas.
    Lo que sí me va, y mucho, son los roscos de anís, y como no tengo receta porque mi madre nunca los ha hecho, me llevo la tuya que tienen que estar súper apetitosos!
    besos guapa!

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  7. Me ha encantado descubrir tu blog y hacerlo con esta receta, son las rosquillas favoritas de mi padre, le encantaba las que le hacía mi abuela pero nunca conseguí su receta. Así que, con tu permiso, intentaré hacerle estas a ver si se aproximan a las de mi abuela y le gustan tanto. Saludos!!

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  8. Pues yo todo lo contrario, no creo que haya tradición que en casa no se haya celebrado, a mi madre no se le pasa ni una, y se refleja tanto en la gastronomía, como en la decoración de la casa o la participación en los eventos estacionales. Tus roscos de vino a mi me trasladan más bien a Navidad, aunque sinceramente, ricos están en todas las épocas del año. También me ha llamado la atención ese hecho siempre, que cada comida o dulce sea específico de una efeméride. De momento para ir haciendo boca no está mal empezar degustando estos roscos que son una maravilla culinaria. Y ya seguiremos después con otras celebraciones.
    Bss

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  9. Hola Isa, así que una niña salvaje... que graciosa. Me recuerdas un poco a mí, que vengo de un pueblo muy joven, con poca historia y con muchas costumbres valencianas adquiridas gracias a todos los valencianos que vinieron a conformar lo que hoy en día es Isla Mayor, mezclándose con cordobeses, granadinos y sevillanos de distintas zonas de la provincia que acudieron a esta zona del bajo Guadalquivir para faenar la tierra y crear mi pueblo. Al no tener mucha edad, este pueblo ha ido creciendo y adoptando distintas celebraciones, por ejemplo unas pequeñas fallas para celebrar la fiesta mayor valenciana, una feria en honor a la cosecha del arroz y la pesca del cangrejo de río (no tenemos feria que provengan de las ventas ganaderas como es lo habitual en Sevilla), misas para las festividades navideñas y Semana Santa, y también celebramos Halloween y alguna fiesta local de creación propia como el día del cangrejo en la festividad de San Rafael, patrón del pueblo. Con Halloween yo viví la experiencia contraria a ti, al principio de independizarnos vivíamos en un segundo piso, por lo que a ningún niño se el ocurría venir a llamar a la puerta y pedir caramelos. Pero cuando nos mudamos a una casa me encontré en la noche de Halloween sola en casa mientras mi pareja trabajaba en turno de noche y un aluvión de niños disfrazados llamando a la puerta... y yo sin un mísero caramelo que ofrecerles! Así que acabé por apagar la luz de casa, bajar el volumen de la tele y aparentar que no había nadie. No sabes el apuro que me daba tener que abrir la puerta y decirles que no tenía nada que ofrecer. Eso no me volvió a pasa, desde entonces preparaba en la entrada de casa una mesita decorada con manteles de brujas y algunos pastelitos de calabaza, y una bolsa negra enorme que compré con una calavera gravada donde guardaba las chucherías para los niños. Este año, en mi nueva casa, no tengo ni idea de si los niños vendrán o no a llamarme a la puerta, pero teniendo en cuenta que tardo casi dos minutos en levantarme del sofá, coger las muletas y llegar a la puerta de la calle (atravesando el patio), voy a tener que volver a esconderme en casa y desconectar el porterillo, lo siento por los niños que se animen a llamar a mi puerta. Los roscos de vino me encantan, en casa hace muchos años que no se hacen, pero mientras buscaba tu entrada de esta semana tenía al lado un pequeño libro de repostería que compré hace poco y donde viene una receta para hacerlos. He comparado ingredientes y cantidades de mi librito y de tu receta y no sabes la cantidad de tachones que hay ahora sobre la receta del libro... está claro quien ha ganado la batalla. Porque no se como enlazar una foto a este comentario desde el móvil, si no te enseñaba los tachones, jeje. Disfruta de esta costumbre adquirida que te separa un poco más del "mundo salvaje". Un besazo y feliz Halloween!!

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  10. Hola Isabel me acabo de encontrar estos roscos de vino y me ha dado mucha alegría porque creo que son exactamente como los hacía mi abuela materna y no sé dónde tengo la receta, llevo tiempo buscándola y ella ya no está con nosotros:-( Resulta que toda la familia de mi padre es de un pueblecito de Cuenca, y mi abuela hacía unos roscos de anís duros y otros de vino que eran creo que como los tuyos, era la masa más o menos como la de los mantecados que hacía para Navidad. Probaré los tuyos a ver si es la misma receta y ya te contaré....besitos guapa y gracias por compartir :-)

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  11. me encanta tu entrada de hoy , por lo que cuentas y por la receta,en casa nos encantan las tradiciones y yo procuro seguirlas lo mas que puedo para que mis hijos aprendan y las sigan manteniendo.
    los roscos de vino son una delicia¡¡.
    besos crisylaura

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  12. ¡Hola Isabel!
    Eso a mí de la gente "buena" que se la pasa en la iglesia y son muy religiosos a mí tampoco me cuadra, de nada sirve que te la pases metido en la iglesia cuando tus acciones y lo que haces hacia las demás personas no son las mejores o te la pases pregonando a los cuatro vientos lo "buena" persona que eres. Yo podría seguir contando sobre esto y lo triste que me pone, e incluso hasta me molesta, pero mejor hablemos de cosas lindas.

    Oye me reí tanto con lo que nos cuentas de los dulces que se te quedaron, pero a la vez me sentí mal, pobre de ti, al menos el año siguiente sí tocaron a tu puerta. Y pues el primer año tuviste muchos dulces para ti solita, jajajaj.

    Hablemos de la receta, me encanta que no se tengan que freír estos roscos, así tienes varios en una tanda, bueno a mí me tocaría en dos porque mi horno no es muy grande y sólo cabe una charola, jeje. Eso de freír dona por dona se me hace una lata. Hace como 4 años hice donas así y ya no me quedaron ganas, jajaj. Por eso tu receta me viene de lo mejor. ¡Buenísimos que se ven Isabel!

    ¡Un abrazote grande!

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  13. Hola guapísima!!!

    Casi casi creí que al acercar el dedo a la pantalla me iba a manchar con el azúcar de tus riscos roscos de vino, qué fotospordiosIsabel !!!! ;)
    Pues verás, en casa somos de tradiciones hasta cierto punto, y digo esto porque ahora mismo casi todas ellas las llevamos a cabo por contentar a mi madre (el binomio de fiesta-religiosidad es inherente todavía en muchas de ellas) pero estoy segura que con el tiempo las eliminaremos de un plumazo y sin contemplaciones jajaja
    Durante años celebré Halowen cuando mis hijos eran pequeños, por una encontraba divertida esa parte festiva en un día tan señalado y no con esa pena y tristeza con la que se vivía siendo yo niña. Con el tiempo le he cogido un poco de rabia . . . pero eso es otro cantar.
    Tus roscos son divinos de verdad, y ayer precisamente estuve haciendo con mi madre los suyos que van fritos, y ella es de ideas fijas y no admite probar recetas diferentes a las hechas "de toda la vida"
    Ya caerán, te lo aseguro.
    Besotes gordos mi niña salvaje preferida jajaja

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  14. Hola Isabel, para mí has vuelto ha dar en el clavo, los únicos polvorones que me como en navidades son los roscos de vino, me encantan!!!! Tienen un sabor delicioso y encima estos tuyos caseros, deben de estar de vicio, me guardo la receta que me ha gustado mucho. Por cierto, que pena no haber sabido antes que esperabas a los niños para darles caramelos, porque precisamente, mi marido y yo siempre acompañabamos a mi hija Sonia y a sus amigas en San Antonio a pedir caramelos, y es bonito pensar que van a abrir y les van a dar caramelos a los niños, el año pasado ya lo pasamos aquí en Alacuás y este año también, lástima no haberte conocido antes, jejeje Besoss

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  15. Hola Isabel, la verdad es que si nunca has tenido una tradiciones arraigadas puedes apoyar las que apetezcan y te gusten, así disfruta de ellas sin tener que dar explicaciones.
    En mi casa si que hay unas cuantas, sobre todo con los dulces cada época, los huesitos y los buñuelos para los santos, el roscón en Reyes, el turrón en Navidad, torrijas en semana santa... Y no les saques de ahí, jajaja, que como compra roscon en noviembre hay lío!! Menos mal que tus rosquillas se puedes comer en todo momento ;)
    Besos, Ángela

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  16. Que pinta tienen estos roscos Isabel!! me han enamorado, que bonitos además de riquisimos, ya lo creo.. Mira estuve interna 4 largísimos años de mi vida en un colegio de monjas al cual me iban a buscar solo en navidad a mi hermana y ami, y te aseguro que la gente que va mucho a misa para nada es la mejor, y empezando por ls monjas, las había buenas, pero las había que eran el mismo demonio, no se como esa gente puede meterse monja, a mi hija jamá quise que fuera a un colegio de esos, mi experiencia fue horrorosa, no voy a entrar en detalles porque ahora sobran pero con esto te vengo a decir que esas costumbres tan cerradas no me gustan nada, aunque cada cual que haga lo que le venga en gana, tu creciste salvaje y libre!! ya quisieran muchos, lo malo es que ya no quedan sitios así para vivir...Besos guapa

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  17. Pues yo soy de algunas tradiciones pero no de todas, opino un poco como tu sobre esas caras tapadas y en penitencia eso a mi no me va mucho, pero son respetables por supuesto.
    Tus riscos me encantan en casa los hacemos fritos y la manera tuya es mucho mejor tendré que probarlos.
    Sabes a mi tampoco me gusta Halloween pero me encanta ver como disfrutan los niños con las golosinas.
    Un besazo Isabel.

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  18. Hola!
    Con mi abuela estuve rodeada de tradiciones, a ella le encantaba celebrar todas las fechas posibles y todo siempre encabezado por una comida especial para lo que estuviéramos celebrando. Ahora que ella ya no está y que me he acoplado tanto a la ciudad he perdido algunas de esas costumbres pero he adquirido otras pero siempre he sido de las que le encanta decorar todo dependiendo de la ocasión y reunir a mi familia en la mesa.
    Estos roscos tienen una pinta exquisita, de verdad que se ven muy provocativos y me podría animar hacerlos aunque soy un poco miedosa con el aceite, pediré ayuda.
    Gracias por la receta.
    Besos

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  19. Hola Isabel, me ha encantado leerte!
    No puedo imaginar un lugar sin tradiciones, porque los humanos somos seres de costumbres...Yo vengo de una familia católica muy creyente y somos del pensar que ser "bueno" no es darte golpes de pecho delante del altar, sino lo que dicen tus acciones.
    Particularmente me cuesta adaptar costumbres de otros lugares, como que no se engranan en mi cabeza, pero me gusta conocerlas, saber como otras gentes celebran fechas, acontecimientos, es muy enriquecedor, es parte de los lazos que unen a las personas como comunidad.
    Me gustan tus rosquitas, he comido unas parecidas, pero en forma que parecen un tornillo, enroscadas en un extremo y así como las tuyas rebozantes en azúcar, qué ricas con un café. Un abrazo!!

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  20. Hola Isabel!! Es extraño tu pueblo sin costumbres jajaja, casi que la palabra pueblo y costumbre, van de la mano!!
    Yo si vivo en un pueblo de costumbres, demasiadas diría yo jajaja, Nosotros en el día de navidad, (me la has recordado) teníamos por costumbre estrenar ropa, lo que fuese, aunque fuese un par de calcetines, y se iba a casa de los padrinos (de bautizo) y se les decía una cantinela... te la traduzco pues es en valenciano "Dice mi madre que me mires por delante y por detrás y después que me estrenes" La palabra "estrenar" significa dar dinero jajajaja, los padrinos daban un dinerillo al ahijado-a pero también hacían lo mismo los abuelos con lo que recogías un buen dinerillo con el que tu madre te compraba zapatos nuevos o algo asi.
    Es preciosa tu entrada, muy entrañable!! Y tus roscos son para ponerles un piso!! adoro los roscos y si son horneados, más que fritos, mejor!
    Un besote

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  21. Hola Isabel!! Pues yo no soy muy tradicional... soy más bien original y como dices tu un poco salvaje jeje! Vivo mis propias tradiciones, me las creo yo misma y me gusta creer en cosas sencillas. Por eso no me gusta toda la hipocresía que hay con respecto a algunas tradiciones, la gente va de santita y es la más falsa que hay, es que no aguanto las mentiras ni la hipocresía así que mejor voy a mi rollo ;) Y rollos a parte me encantan todos los postres de tradiciones pero como soy una rebelde yo los hago cuando me apetezcan jaja! Las crêpes por ejemplo, en Francia se comen esencialmente para el 6 de ferbrero pues yo las como a todas horas! Jaja! Tus rosquitos me parecen divinos y me gusta mucho el saborcillo a anis que les das. Y encima los has hecho al horno (!!), no sabía que se podían hacer así, siempre los he visto fritos... Me llevo unos cuantos que ya me voy a tomar el cafe jeje! Un besote de niña salvaje a otra niña salvaje jaja!

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  22. Isabel, querida, has tocado un tema muy "delicado" (jajaja) el de las costumbres y tradiciones... conozco personas que jamás se acuerda de que Dios o el prójimo existe... solo en las fiestas de guardar... pero no quiero meterme en ese tema.

    Tus rosquillas de hoy me requete-encantan!!! Mi madre, como te ha dicho mi hermana más arriba las hacía frítas, pues como somos muchos no daríamos abasto con el horno... Tu receta de hoy me la guardo, pues tengo ganas de hacerla, ahora como en casa somos solo dos... si salen 20 como indicas en tu receta, seguro que en varios días nos las comemos sin rechistar... Besos linda, hasta la semana que viene.

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  23. Hola Isabel, que relato más apropiado para esta época de Halloween, lo he disfrutado muchísimo y más como dicen en muchas pelis y sseries ..."basado en hechos reales...". A mi me encanta Halloween y cualquier fiesta en general, estoy completamente abierto a cualquier celebración que conlleve el pasarlo bien, me encanta disfrazarme y hacer el ganso como si tuviese 5 años. Este año estoy haciendo una figura en arcilla de una brujita y pensando en qué dulce hacer para este próximo lunes.
    Por supuesto, mantener siempre nuestras costumbres y estos roscos de vino te los robo pero ya, que deliciosos, además, para mi gusto, estos dulces son de mis preferidos desde pequeño, as´ñi que me guardo la receta para estas próximas fechas.
    Un abrazo y que pases un feliz puente.

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  24. Hola guap! bien que haces en adquirir nuevas tradiciones, y más si son de estas tan ricas :P No se dónde te criaste, pero creo que forman parte de cada cultura y es algo importante para celebrar, esas cosas que nos unen a todos. Yo tampoco soy de celebrar los santos ni halloween pero siempre cae alguna de estas recetitas que tanto gustan, una delicia!

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  25. Bien buenos que te quedaron estos roscos.
    Un saludito

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  26. Hola, Isabel, no conocía tu blog y ha sido a través de Cuca que he tenido curiosidad para verlo y saber las cosas buenas que tendrías. Me encantan los roscos de todas formas y maneras, con mucho azúcar de ese que al comerte uno o diez deja rastro ;) en la ropa eh! De la tripa ni hablamos. Yo sí celebraba el Halloween poruqe iba a un colegio americano pero despúes cuando vinimos con mis padres a vivir en España nos llevaron a una procesión en Valladollid o Salamanca no lo recuerdo bien y no sabes el susto que tenían mis hermanos que acabaron llorando y yo que era un poco mayor horrorizada de aquella gente pegándose en la espalda desnuda y todo tan oscuro solo iluminado con velas, me dio terror aquello aunque no lloré por hacer de hermana mayor. Acabaron llevándonos a los tres al hotel y cenar allí dentro sin ver más procesiones ni nada de nada. A mis padres aquello les salvó de volver a llevarnos a nada, sin antes saber lo que íbanos a ver. Hoy ya casi no veo nada de semana santa, aunque hay una cantidad de arte y piezas maravillosas que si no existiesen esas cofradías quizá hubiesen desaparecido o deteriorado mucho. En fin, sigo de paseo por tu blog viendo más recetitas. Besos

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  27. Hola Isabel. A medida que se cumplen años, la óptica de la vida va cambiando de perspectiva, con esto no quiero decir que me haya vuelto amante de esta fiesta jj, nunca lo he sido, pero en estos momentos, aunque no me guste, tengo que reconocer que no me queda más remedio que vivirla.
    Comparto en gran medida lo que escribes y me ha llamado la atención que crecieras en un lugar con apenas tradiciones, ya que hasta el más humilde de ellos las tenía jj pero no pongo en duda tus palabras jj lo que te debe ocurrir es que, aunque la juventud te orne, la memoria ha querido jugarte una mala pasada jj.
    Isabel, pues bienvenida sea esta tradición que has adoptado al obsequiarnos con estos exquisitos roscos, ya que al leer los ingredientes y como los has hecho no dudo de que tienen que estar de rechupete y además ¡¡sin freír!! jj. Hice unos parecidos hace ya algún tiempo pero eran fritos. Me guardo la receta.
    Que tengas un muy buen fin de semana.
    Un abrazo.

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  28. Soy de la opinión de vivir y dejar que los demás también lo hagan. Respetando siempre, cosa que no todo el mundo sabe hacer. A mí en particular ni me molesta, ni deja de molestarme la fiesta importada, es una excusa para que los niños se diviertan y de paso que pierdan el miedo que tanto tuvimos algunos en nuestra infancia y adolescencia, que si viene el hombre lobo, que si Drácula, que si la momia... jajaja. Entonces los mayores no sabían qué inventar para tenernos asustados y que nos estuviésemos quietecitos. Mejor así ¡que se familiaricen! jajaja.
    De que fuiste una niña salvaje, no me lo creo mucho, sí que fueses nerviosilla, que no parabas quieta, de ahí tu actual profesión. Ahora, seguro, que en tu vida familiar hay paz y sosiego.
    No he hecho los roscos de vino y sí los de anís y aguardiente, también horneados, pero no descarto comprar el moscatel y probarlos pues tienen un aspecto tremendo. Muchos besos guapa.

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  29. me encantan los roscos de vino, estan deliciosos aunque nunca los he hecho

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  30. Que buena pinta tienen!!!Se ven muy facil de hacer,deberia de intentar hacerlos!!!un saludo!!

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  31. Hola guapísima!! Pues yo tengo que decirte que para empezar los roscos se salen del plato, de la pantalla y que ojalá uno llegue a mi casa, jajajaja!! por otro lado, a aunque no sea mi blog, pero me comosi lo fuera, porque me duele, decir a la señora o señor anónimo que cuando alguien viene por primera vez a un blog, al menos se presenta, es lo menos. Lee bien la entrada, pues va a comentar después y además se entera bien de lo que el autor del post quiere decir. No dudo que su coeficiente intelectual sea alto pero la comprensión lectora debe mejorarla.
    Yo sí soy de tradiciones, más que de tradiciones de celebrar, todo lo que nos haga reunirnos, festejar y pasarlo con bien con la familia. En mi casa no se ha celebrado nunca el dia de Tosantos. A mi madre la superaba este día, ella no era de cementerios, ni de hacer comidas eseciales por este día. Las bolitas de boniato las hacía para navidad, al igual que rosquillos, pestiños.... Aunque por ser otoño siempre caían de vez en cuando alguna bandejita de estos dulces porque ella los disfrutaba. Sin embargo , cuando conocí a mi marido , él compraba , por tradición , los huesos de Santo, ahora se los hago pues ya les gustan más los míos.
    Halloween no lo celebro, mis hijas alguna vez se disfrazaron de niñas, pero nada más.
    Bueno después de este testamento que te he escrito, feliz fin de semana y pásalo lo mejor que puedas, eso siempre guapísima!!

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  32. They look delicious!

    http://beautyfollower.blogspot.gr/

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  33. Hola preciosa!! me ha hecho gracia eso de niña 'salvaje'. Mira yo nunca celebré Halloween, ni fui a picar a ninguna casa a cantar villacincos, imagino que lo desconocía. La verdad que fui una niña muy tranquila y ninguna de mis amigas hacía nada parecido, así, que hasta que no fui una adolescente no tuve idea de estas costumbres, figúrate...
    Yo hace mucho que lo celebro todo. Mucha gente el día de difuntos lo vive como un día triste y yo al tener a mis seres queridos enterrados en León, cuando he podido ir para estas fechas, se ha convertido en un día alegre, porque los he tenido más cerca....
    Estos roscos de vino me parecen deliciosos, mira que me da pereza hacerlos porque se ensucia tanto la cocina que es un engorro, pero quedan muy muy ricos. Nunca los hice de vino moscatel, pero deben quedar muy aromatizados. Te han quedado perfectos.
    Te he ido siguiendo todas las semanas, pero hasta ahora no he dejado ningún comentario. He estado muy liada con temas varios (nada importante), pero ya sabes, con muchas cosas que hacer y un poco agobiada, la verdad. No sé cuando volveré a publicar, por un lado me apetece y por otro todavía no, así que ya iré viendo. A ver si me desestreso un poco, pero todo está bien.
    ¿tú cómo vas, cómo va el nuevo curso?, imagino que también habrás estado 'a tope', con el campo, trabajo y demás tareas...
    Te envío un achuchón bien fuerte. Por cierto, muchas felicidades por todos tus regalitos, ¡¡qué alegría me ha dado!!, ya que lo habitual es que no toque nunca ningún premio.
    Besitos

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  34. Hola Isabel, pedazo de roscos que has hecho!!! Tienen un aspecto increíble, ay, que pena que no pueda llevarno unos poquitos para la merienda... Respecto a las dobles morales claro que las hay, las hubo y las habrá... Por cierto, a mi Halloween me gusta pero nunca han venido a pedirme caramelos. Tradición y novedad no tienen por qué estar reñidas, no veo nada negativo en adoptar una fiesta y bienvenida sea si sirve para alegrar a la gente, que las desgracias ya vienen solas. Besos.

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  35. Como no tengo la cabeza donde debería tenerla, ahora que he acabado de leer tu entrada, me has recordado que tengo que comprar chuches, a mi puerta no dejan de llamar y no sólo vienen los niños de los pisos inferiores, se apuntan todos los de la parcela, que dicho sea de paso es enorme, y te acaban con todo lo dulce que tengas en casa.
    Tengo un hijo al que esos roscos le encantan, tendré que volver a leer detenidamente tu receta, si tuviera humor y ganas, podría darle una buena sorpresa.
    Agradezco muchísimo tus letras de apoyo.
    Cariños en abrazos.
    Kasioles

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  36. Mi querida amiga, antes de nada felicitarte por tu entrada, y felicitarte por tu forma de ser, cuanta razon llevas en lo de la semana santa, y perdon a quien le moleste, conozco algunos penitentes, tal y como tu los has descrrto, y eso no es para molestarse, tambien los hay buena gente como en todos los sitios, asi que con todos mis respetos le digo al señor o señora anonimo , que no has ofendido a nadie, que dar caramelos a los niños no es un crimen, y que si puede lea bien lo que le has contestado con toda la educacion del mundo lo que has hecho y haces para los demas, que eres un cielo, y se acabo . Bueno decirte que tus roscos son una maravilla, y que si estuviera cerca de ti tocaria tu puerta para el truco o trato y para recibir ademas de tus golosinas un buen monton de estos roscos. Mil besicos y no cambies nunca tesoro

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  37. Ay madre del amor hermoso. .. ya he visto por ahí arriba... que el tema Halloween y nuestras constumbres da mucho de que hablar... jajaaa. .. En fin... esto ocurre todos los años... y cada cual que celebre lo que quiera y cuando quiera... que yo de mientras que cada uno mira lo que hace el otro... yo me como ricamente tus roscos que para eso hemos venido! A no dejarte ni uno! Eso si.... yo vengo vestida de vampirilla... que esto de hacer la payasa un rato... me encanta! Jajaaa. .. :) un beso cielo

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  38. Menudo trabajazo ! Seguro que están buenísimos, a mi me encantan jeje
    No me muevo mucho por aquí últimamente (en blogger en general) pero todo lo que haces tiene una pintaaa

    muchos besos

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  39. Hola preciosa, primero que nada decirte que me encantan los roscos, ya te dije x algún lado que yo también los hago y que son mi perdición.
    En casa no somos de Hallowen por dos motivos, el primero es que este boom ha pillado a mis hijos mayores, alguna vez se han disfrazado para ir a alguna fiesta y chim pum y el segundo es que vivo en ciudad y aquí no pasan los niños con el tuco o trato jeje.
    Cuando voy al pueblo disfruto como una niña cuando pasan x casa tanto ahora como en Noche Buena, por las tradiciones no te preocupes, cada cual celebra las que más le gustan y es muy respetable tanto el que no cede un ápice de las suyas como el que adopta las de fuera sin renegar de las suyas.
    Así que no somos de Hallowen pero si preparo recetas típicas como esta tuya que tiene una pinta espectacular, me encantan, te lo ge dicho?.
    Un besote.

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  40. Yo sin embargo me crié en un sitio lleno de tradiciones, y conforme iba creciendo más rebelde me volvía, al esas tradiciones, sin embargo ahora las veo de otra manera diferente, un pretexto para pasar buenos momentos con la familia tanto si son tradiciones de siempre, como las de nueva tendencia, como haloween.
    Este roscos me encantan deliciosos.
    Besos.

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  41. Hola preciosa!!
    Pues yo soy muy de tradiciones, me gustan mucho y respeto las de los demás también, porque claro, tampoco pueden gustarme todas jaja. De entre ellas, me gusta mucho Halloween, es lo que tú dices, los niños pidiendo chuches por las puertas, la decoración...Me encanta cómo lo viven los americanos, y cómo viven la Navidad, que es mi tradición favorita. Allí tiene todo otro aire, muchos dirán que más comercial (que también), pero qué le voy a hacer? a mí me gusta ese ambientillo.
    Los roscos te han quedado de relamerse los bigotes, me dice el chef. Creo que ya lo tengo en la cocina preparando los ingredientes...Ya te contaré lo que me toca recoger...
    Un abrazo guapa!

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  42. Woww que lujo de roscas se ven divinas,abrazos.

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  43. Hola Isabel!!! No sabes lo feliz que sería yo en tu pueblo. Yo no soy de tradiciones festivas. Me encantan los roscos y mirar las fotos pues se pueden coger casi con las manos. Ya me está apeteciendo hacerlas. Feliz día. Bs.

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  44. Hola bonita!
    Huy, cómo está el patio...ahora entiendo algún comentario que he visto por ahí. La verdad que en España pocos pueblos habrá sin tradiciones y justo te tocó a tí, jaja Bueno, pues adopta todas las fiestas que quieras siempre que te gusten y estés de acuerdo con lo que significan, sin quedarte en la mera apariencia. A mí no me va hallowin, pero respeto a quienes le gusta (que parece que cada vez son más, por la difusión que se le da entre todos) Los roscos que has preparado no me los salto por nada del mundo ¡¡me chiflan!! me los llevo para mí solita, si me dejaran...acababa con ellos rápidamente! lo malo sería el pedazo de susto al subirme a la báscula ¡¡argg!! pero que me quiten lo disfrutao, jajaj!! Riquísimos!!
    Muchos besos.

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  45. Hola Isabel, los roscos de vino son una delicia. Como venga por tu vera, te dejo sin, jeje. Aunque a estas horas ya creo que no te debe quedar ninguno. Te han quedado espectaculares, y me muero de ganas de probarlos. Un feliz día, besos!!

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  46. ¡Hola! A mí me parece muy divertido Halloween también y los niños se lo pasan bien. Con esta receta ya se me contagia un poco el ambiente navideño, me encantan los roscos de vino. Cuando nos demos cuenta ya estamos en Navidad otra vez jejeje.
    Yo conozco una receta parecida, unos dulces que llama mi tía "corbatas". Se hace la masa y demás pero en lugar de usar el horno, se fríen en el aceite.
    ¡Ah! Y las fotos te han quedado preciosas.
    Un saludo :)

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