Torta de Quinoa, Calabacín y Queso

Hacía tiempo que no venía nuestro amigo Carlos a comer, con esto de la pandemia, no había podido ser. Así que hice algo especial para él, que es un chico de los de hoy en día, que se cuida y es muy deportista, así que tenía que hacer algo sano, equilibrado, pero que le diera algo de energía, y de ahí salió esta Torta de Quinoa, Calabacín y Queso. Y si a todo eso, le añades un buen chorrito de aceite de oliva, la receta queda redonda. Y el aceite utilizado, no podía ser otro que el que Marisa me hizo llegar como premio por haber sido una de las finalistas en su 10º concurso-aniversario. 

El aceite que empleé es el virgen extra ecológico de Casa Albert y está riquísimo, gracias por el estupendo regalo, te aseguro que lo hemos apreciado mucho en casa. 

Nuestro amigo Carlos, no es la primera vez que me hace de modelo para las fotos, lo podéis ver en este rico Brioche Trenzado de Chocolate y en unas Cookies Integrales de Chocolate y Frutos Secos que él mismo cocinó, aún sin saber cocinar y bajo mis "órdenes" y le quedaron fabulosas, pero es que es una persona muy competitiva y a todo le pone mucho interés y así, es imposible fallar. 

Pues, justo estaba terminando la sesión fotográfica del plato, cuando apareció él y le pedí que me "prestara" sus manos para las fotos y accedió, como siempre, de buen agrado (también le pedí a mi marido que pusiera las suyas y salió corriendo, en fin, sin comentarios, ja, ja). 

Por cierto, muchas gracias a todos por las molestias en la receta de la semana pasada donde os pedía si sabíais qué flores eran las de la foto. Al final, descubrí que eran Lilas, que por aquí he visto por varias casas, pero son otro tipo de lilas que yo conocía perfectamente y no pensaba que este árbol tan grande y con ese color tan potente, podían ser también lilas, en concreto, Syringa, y justo la foto que aparece representando en la Wikipedia, es este árbol que os comentaba la semana pasada, y al llevar tanto tiempo sin podar, ha crecido tanto. Gracias a todos por vuestra aportación. 

INGREDIENTES: 4 personas  DIFICULTAD: Fácil  PREPARACIÓN: 30 min  COCCIÓN: 25 min REPOSO: 10 horas

-150 g de quinoa

-1 huevo

-1 pizca de sal

-1 pizca de levadura química

-1 calabacín no muy grande

-150 g de queso ricotta

-25 g de queso de cabra

-25 g de piñones

-1 puñado de rúcula

-1 puñado de canónigos

-aceite de oliva virgen extra 

1. La noche anterior pon la quinoa en remojo con abundante agua.

2. Al día siguiente, precalienta el horno a 200º C. Enjuaga la quinoa y escúrrela con un colador. Pon en bol la quinoa junto con el huevo, una pizca de sal y la pizca de levadura química y tritura todo con la batidora. 

3. Engrasa bien, o mejor aún, forra con papel de horno una tartera de unos 24 cm de diámetro. Yo sólo engrasé la tartera y me costó desmoldarla, por eso recalco que es mejor forrarla con papel de horno. Vierte la mezcla de quinoa con el huevo en el molde y hornea a 200º C con calor arriba y abajo durante 20 minutos. 

4. Lava bien el calabacín y córtalo en rodajas muy finas, preferiblemente con una mandolina. Yo he hecho las láminas del calabacín al vapor, sólo las he cocido durante 5 minutos, para que estén tiernas pero todavía firmes para poder moldearlas y que no se rompan. Puedes cocerlas también en el microondas o al fuego en un cazo con agua, pero recuerda que el tiempo de cocción tiene que ser poco. 

5. En una sartén sin nada de grasa, tuesta ligeramente los piñones. Reserva. 

6. A la hora del montaje, pon la torta de quinoa en el plato donde la vayamos a presentar. Pon encima el queso ricotta. 

7. Trocea el queso de cabra y dispón encima del queso ricotta.

8. Enrolla las rodajas de calabacín y pon encima de los quesos.

9. Por último, deposita encima la rúcula, los canónigos y los piñones. Riega con un buen chorrito de aceite de oliva virgen y sirve enseguida.